Pues bien, la cafeína es un activo alcaloide blanco que tiene la capacidad de actuar de diversa maneras sobre el sistema nervioso. Se encuentra en semillas, hojas y frutos de algunas plantas. En relación con las enfermedades cardiovasculares, se sabe que la cafeína aumenta la presión sanguínea por lo que hay personas que no pueden tomarlo.
La mayoría de la gente piensa que el aroma y el sabor que tiene el café, es gracias a la cafeína, pero no es así. El café tiene un 12% menos de cafeína que el té, y tenemos que tener en cuenta que el sabor se lo dan los azucares y aceites naturales que se obtiene en cada grano de café tostado. De este modo los granos de café Tueste medio tienen un sabor más fuerte y acido. Mientras que los granos de café Tueste intenso tienen un sabor más dulce.
En relación al café descafeinado, debería llamarse de cafeína reducida, pues se podría saca el 99% de ella. Y el café expreso, al contrario de lo que se cree, tiene menos cafeína que el de filtro, pues el agua pasa por lo molinillos más lentamente que por el filtro tradicional.
Algunos consejos para disfrutar de un buen café:
- Se consume café en grano le recomendamos moler y consumir casi al momento, así obtendrá un sabor puro 100%.
- No se recomienda recalentar el café, el sabor no será el mismo.
- Servir el café en vasos de plástico o metal, hace que se altere el sabor original.
- Tomar el café en tazas pequeñas sabrá más rico, que una grande y tomar el café frío.
- Se recomienda preparar el café con agua mineral.
- Si utiliza filtros de papel, humedezca el café con agua fría antes de verter el agua caliente.
- El compañero ideal del café: Chocolate amargo, pues realza el sabor.
